LAS OTRAS CARAS DE LA MONEDA...

Lejos de querer hacer demagogia barata, y sin querer meterlo en el saco del machismo y lo que conlleva, pero sí de una forma paralela, hoy quiero poner el acento en una de las ventajas de ser mujer, y si me inspiro un poco los próximos días seguiré insistiendo.

La mayoría de hombres y mujeres somos personas normalitas, ni guapos ni feos, ni tontos ni listos...normalitos. Si estamos de acuerdo en esto sigo con la siguiente premisa...Es bueno poder satisfacer las necesidades sexuales y encontrar a una pareja de tu agrado para tal fin, no cabe duda.

Imaginemos a dos personas normales y corrientes, un hombre y una mujer, un sábado por la noche, ambos solteros y con ganas de darle gusto al cuerpo...¿no es cierto que la chica va a encontrar a 20 hombres dispuestos a tener sexo con ella por cada mujer que pueda encontrar el chico? es más, ella empleará mucho menos energía y tiempo, tendrá un abanico más grande donde elegir y tendrá más control sobre el tipo de sexo que quiere tener.

Si a eso le unimos que desde un punto de vista hormonal, como psicológico y social, la mujer no tiene una necesidad tan acuciante como el hombre de satisfacer sus deseos sexuales (y no quiero entrar en valoraciones, sólo lo dejo ahí sin temor a equivocarme), el escenario es infinítamente más ventajoso para la mayoría de las mujeres.

Pero podemos añadir más cosas al respecto, cualquier mujer tiene a su disposición muchas más armas de seducción que un hombre:

- Dispone de una zona más del cuerpo considerada sexualmente tabú y por tanto deseable para su posible pareja (el pecho).

- Su vestuario es más diverso y útil a la hora de ser usado para seducir.

- Dispone de maquillaje para resultar más atractiva.

- Y por último si entramos en el fascinante universo de la lencería allí encontrará todo un arsenal para machacar al contrincante.

Extrapolando esa mayor capacidad y escenario favorable para la seducción a otros fines diferentes a la satisfacción de su propio deseo sexual, podemos afirmar también que la mujer puede hacer uso de todo lo dicho para tomar ventaja en otras muchas parcelas de interacción social, y si pasamos de hablar de la chica normalita a la chica mona la cosa se pone aún más a su favor.

Si alguien quiere añadir algo, discutirlo o matizarlo, adelante por favor, estoy totalmente abierto a la dialéctica.